Qué es la libertad financiera

¿Qué es la libertad financiera y cómo puedes conseguirla?

La inflación y la constante subida del precio de la vida son un motivo para que mucha gente busque fórmulas para mejorar el estado de sus finanzas, lo que se conoce como la libertad económica o financiera. Si te preguntas qué es la libertad financiera, cuáles son sus ventajas y cómo conseguirla, este artículo te interesa.

Y es que la libertad financiera es algo por lo que muchas personas luchan en sus vidas, pero no siempre saben exactamente qué es o cómo conseguirla.

Afortunadamente, es posible alcanzar esta independencia económica y a continuación te detallaremos qué es y, lo más importante, cómo puedes alcanzarla, ya que no es tan difícil como piensas.

¿Qué es la libertad financiera?

A modo de resumen, la libertad financiera es el estado de no depender de otros para obtener dinero. Todo el mundo quiere alcanzarla por diversas razones, entre ellas la capacidad de tomar sus propias decisiones y tener control sobre su vida.

Lo bueno de conseguirla es que permite a las personas dedicarse a sus pasiones, mantener a su familia y tener libertad para viajar o hacer lo que deseen.

También puede significar no tener que preocuparse por las facturas mensuales y tener ahorrado lo suficiente para cualquier emergencia o necesidad de cubrir una situación económica. 

La libertad financiera es la capacidad de gestionar tus finanzas sin tener que depender de un trabajo a tiempo completo para obtener ingresos. Es la sensación de poder y control sobre tu vida.

Implica ser capaz de pagar tus facturas, ahorrar dinero para los días de vacas flacas y tener suficiente para disfrutar de los lujos de la vida.

Por último, puede dar a las personas la flexibilidad necesaria para cambiar de trabajo o de profesión si así lo desean.

En resumen, la libertad económica consiste en tener la libertad de tomar decisiones sobre tu vida que quizá no puedas tomar si dependes de otras fuentes de ingresos.

¿Cuáles son los beneficios de la independencia económica?

La independencia económica es uno de los mayores beneficios que proporciona conseguir la libertad financiera. También está el tiempo adicional que te proporciona.

En lugar de estar preocupado todo el rato por el dinero o cómo conseguirlo, puedes utilizar el tiempo extra para centrarte en otros aspectos de tu vida.

Puedes trabajar en crear nuevos objetivos, pasar tiempo con la familia, dedicarte a tus aficiones e intereses. La libertad financiera también es una forma estupenda de reducir el estrés y los problemas de salud no deseados relacionados con el estrés.

Otro gran beneficio es la capacidad de asumir riesgos e invertir dinero en ti mismo y en tus propios proyectos. Con la libertad financiera, puedes ir tras lo que quieres en la vida y no tienes que preocuparte por no poder pagar tus facturas. Eres libre para innovar y explorar tus intereses.

Vale, todo esto está muy bien pero, ¿cómo alcanzar este estado económico? A continuación, tienes la respuesta, pero antes déjanos contarte dos cosas.

¿Cómo puedes alcanzar la libertad financiera?

Lo más importante a la hora de conseguir la libertad financiera es seguir las indicaciones que te vamos a dar. De poco te vale saber la teoría si no la pones en práctica.

Otra cuestión importante es entender que este estado financiero es diferente para cada persona. Mientras tú puedes estar tranquilo con 20.000 euros en el banco, otra persona puede necesitar más dinero.

Es clave entender este concepto, te lo repetimos: la libertad financiera es el estado de no depender de otros para obtener dinero. La cuestión es aplicar esta filosofía durante bastante tiempo, de poco te sirve ahorrar para vivir sin trabajar un año o dos, si después gastas todo o no tienes recursos.

Por todo esto, el aspecto más importante alcanzar la libertad financiera es aprender a vivir por debajo de tus posibilidades y ahorrar una cantidad significativa de dinero.

Como te indicamos antes, esta cifra de dinero es relativa y varía según varios aspectos:

  • Tu nivel de vida.
  • El sueldo que tengas.
  • Los gastos mensuales. No es lo mismo ser soltero que tener hijos o que tu pareja trabaje.
  • El lugar de residencia. El coste de la vida en una ciudad mediana suele ser menor al de un municipio grande.
  • Si tienes deudas pendientes. 
  • Cuanto pagas de hipoteca. 

Los aspectos anteriores delimitan la cantidad de dinero que te queda a final de mes. Una vez sabes esta cifra puedes trabajar con ella. Esto es clave ya que para alcanzar este estado debes partir de una base.

Una vez sabes lo que te queda limpio debes intentar ahorrar al menos el 10-15% de tus ingresos. Este dinero puede invertirse y utilizarse para generar ingresos adicionales.

Por supuesto, debes considerar reducir tus gastos y llevar un estilo de vida que esté dentro de tus posibilidades y el de tu familia.

En este sentido, es importante analizar y saber dónde va tu dinero y comprueba si hay gastos innecesarios que puedan eliminarse.

La importancia de la diversificación

Invertir tus ahorros es una empresa importante, y es esencial tomar medidas para proteger tu inversión de posibles riesgos a la baja. Una de las mejores formas de hacerlo es mediante la diversificación.

La diversificación reparte tu inversión entre distintas clases de activos y sectores para minimizar el impacto de cualquier acontecimiento individual en tu cartera.

Por ejemplo, si inviertes parte de tus ahorros en acciones y parte en bonos, podrás capear un descenso del mercado más fácil que alguien que invierte exclusivamente en una clase de activos.

Otra forma de diversificar es invertir en activos inmobiliarios como por ejemplo:

En el caso de querer comprar una propiedad para alquilar debes tener en cuenta el rendimiento que te vaya a dar.

Partiendo de esta base, te merece la pena analizar si te es mejor adquirir una vivienda para alquilar o bien para vender en un futuro y sacarle más rendimiento.

Diversificando tu cartera, puedes ayudar a proteger tus objetivos de inversión a largo plazo para que no los desbaraten los movimientos del mercado a corto plazo.

Además, te dejamos estas claves:

  • No inviertas en sectores que no dominas y sean de alto riesgo: bolsa, criptomonedas, etcétera.
  • Considera tener un consejero económico o financiero para que invierta por ti.
  • Consulta tu perfil de inversor, hay tres: conservador, moderado o agresivo. Para determinar este aspecto puedes hacer un test online en páginas como Expansión o entidades bancarias.

Ingresos adicionales

Además de ahorrar dinero e invertir parte de tus ahorros también tendrás que generar ingresos adicionales.

Esto puede hacerse de varias formas. A continuación, te damos algunas ideas:

  • Puedes escribir un libro de una materia que dominas y cobrar derechos de autor por él.
  • Invertir en otros negocios.
  • Encuentra trabajos extras.
  • Empezar un negocio propio.
  • Gestiona propiedades.
  • Responder encuestas online u otros trabajos por internet.
  • Haz trading o invierte en bolsa: (recuerda cantidades pequeñas).
  • Crear contenido para un blog y hacer marketing online.

En conclusión, hay muchas formas de generar ingresos adicionales al margen de tu trabajo que te permiten conseguir la ansiada libertad económica.

Ahora que ya sabes qué es la libertad financiera y cómo conseguirla, te animamos a conseguirla. Piensa que es un objetivo alcanzable, pero requerirá trabajo duro y dedicación.

Tienes que tener un plan y un presupuesto, y ceñirte a ellos. Asegúrate de ahorrar todo el dinero que puedas, gastar dentro de tus posibilidades y encontrar fuentes de ingresos adicionales.

Hacer esto de forma constante a lo largo del tiempo te permitirá alcanzar dicho estado.

Desde Renovalia Inmobiliaria esperamos que os haya parecido interesante este artículo y os recordamos que nos tenéis a vuestra disposición si necesitáis cualquier consulta o ayuda a la hora de comprar y vender una vivienda.

Finalmente, os invitamos a consultar nuestro blog inmobiliario que actualizamos cada semana con noticias tan interesantes como la de libertad financiera.



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