El mercado inmobiliario está pendiente de La Nueva Ley de la Vivienda que el Gobierno pretende sacar en los próximos meses. Esta normativa incluye la figura de la vivienda asequible incentivada de la que te vamos a hablar en este artículo.
Vivienda asequible incentivada: ¿Qué es?
El Gobierno pretende liberalizar el alquiler para aquellas personas que tienen problemas de pagar un alquiler o de hacer frente a la compra de un piso.
En concreto, para aquellas personas con recursos bajos que no se pueden permitir pagar un alquiler.
Esta modalidad se pretende conseguir con la figura de la Vivienda asequible incentivada que el Gobierno incluirá en La Nueva Ley de la Vivienda de 2022 que aprobará por la vía de emergencia.
Es decir, la vivienda asequible incentivada pretende hacer lo que su nombre indica. Para ello, se usará como base viviendas privadas que estarán dedicadas al alquiler a precios muy reducidos.
Aunque España sea un país de propietarios, se calcula que existen 14 millones y medio hogares en propiedad, lo cierto es que también hay mercado de alquiler con 3,2 millones de españoles en dicha situación.
Sin embargo, no todo el mundo puede hacer frente ni al alquiler ni a comprar una casa, por este motivo, se pretende incentivar el modelo de arrendamiento con este tipo de hogares para personas con ingresos bajos.
Diferencias entre la vivienda asequible incentivada y la protegida
La figura de la vivienda asequible incentivada convivirá con otra figura similar que es la vivienda protegida.
La vivienda protegida es una modalidad de vivienda de protección pública destinada para gente con pocos recursos. Estas viviendas pueden ser destinadas en diferentes regímenes, tanto de alquiler como de compra y deben cumplir ciertos requisitos de diseño, superficie, calidad, uso y precio máximo.
Según la puntuación que reciban se destinarán o no a protección pública. Para acceder a este tipo de recursos se deben cumplir diversos requisitos que varían en función de la economía de la familia y los requisitos que ponga cada administración o Gobierno.
Por ejemplo, la renta que se pida en Galicia será menor que en Madrid o Euskadi que son Comunidades Autónomas con unas rentas superiores a la gallega.
La diferencia entre una modalidad y otra, es decir, entre la vivienda asequible incentivada y la vivienda protegida son los beneficios urbanísticos y fiscales que puedan conseguir los propietarios.
Y es que los propietarios serán los que pongan en alquiler sus viviendas a precios reducidos por lo que contarán con ciertas ventajas para decidir poner estos hogares en arrendamiento. Por otro lado, el sistema de vivienda protegida implica que el propietario o arrendador es aquella persona que se beneficia directamente del precio.
Es decir, la vivienda de protección pública o protegida los pone el Estado o los Gobiernos para alquilar.
O sea, la vivienda de alquiler incentivada es privada y la vivienda protegida es un sistema público.
Otra diferencia son las bonificaciones que recibirán los dueños de vivienda protegida incentivada que se espera que reciban los siguientes beneficios:
- Bonificación fiscal de hasta el 90 por ciento en la tributación fiscal del IRPF.
- Este porcentaje es variable. Puede ser del 50 por ciento si se alquila directamente así. Un 70 por ciento si se hace para personas de entre 18 y 35 años, o sea, jóvenes.
- Y hasta un 90 por ciento si se rehabilita la vivienda y se hace en zonas tensionadas o conflictivas.
¿Cuál es la función de la modalidad de vivienda protegida o incentivada?
Ambos sistemas, tanto el de modalidad de vivienda protegida como el de vivienda incentivada tienen el mismo objetivo: potenciar y fomentar el alquiler entre las personas con pocos recursos.
Se pretende así aumentar la cifra de 3 millones de personas que están en régimen de alquiler con un sistema incentivador.
Conseguir una cifra superior es una idea que se pretendía conseguir con otras ideas como un parque público de alquiler o fondo social de viviendas.
Sin embargo, este parque público de viviendas es caro de mantener y origina muchos problemas, de ahí la opción de privatizarlo e incentivarlo con esta figura de la vivienda de alquiler incentivada.
El gobierno espera que esta modalidad en combinación con otras medidas y el formato de vivienda protegida consiga el efecto esperado.
Para ello, también entrarán en juego la figura de los agentes sociales, públicos y privados que tratarán de garantizar que no exista problema de oferta de vivienda de este tipo.
Por otro lado, también se espera que las personas con pocos recursos puedan acceder a este tipo de viviendas que deberán cumplir los requisitos marcados por las Comunidades Autónomas que son las administraciones competentes en la materia.
Habrá que esperar hasta que se apruebe la ley para saber qué pasará con esta figura llamada vivienda asequible incentivada que esperamos haberos aclarado con este artículo.
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