A la hora de comprar una vivienda el precio suele ser uno de los motivos principales por los que la gente tiene dificultades a la hora de invertir en una vivienda. En la actualidad el importe ya no es una excusa, y es que el crowdfunding inmobiliario es una nueva forma de invertir en vivienda sin tener que realizar un gran aporte de capital. Lo bueno de este sistema es que con poco dinero (menos de 50 euros en algunos casos) puedes invertir en una propiedad inmobiliaria.
Aunque de momento son pocas las compañías que cuentan con todos los permisos y certificados para realizar este sistema de inversión todo apunta a que crecerán en los próximos años. Este nuevo sistema de inversión inmobiliaria llamado crowdfunding inmobiliario pretende democratizar la inversión inmobiliaria en España. En el resto de países europeos nos llevan unos cuantos años de ventaja, aunque en España desde el 2016 han surgido empresas y plataformas que se dedican a este revolucionario sistema. En especial, en las principales ciudades como Madrid y Barcelona.
Este modelo inmobiliario tan innovador tiene sus pros y sus contras, por ello, te vamos a contar todos los detalles para que sepas cómo funciona. Lo primero de todo es explicar en qué consiste este sistema de inversión.
¿En qué consiste el crowdfunding inmobiliario?
Los gestores de estas plataformas proponen a los futuros inversores diferentes proyectos de compra de todo tipo de inmuebles para su posterior venta o alquiler.
Antes de proponer cualquier proyecto los dueños de las plataformas inmobiliarios analizan distintos proyectos de venta y reforma de edificios, locales y viviendas en ciudades con gran número de habitantes. Después las empresas de crowdfunding inmobiliario llevan a cabo todo el proceso de papeleo, burocratización y análisis de las inversiones cobrando por ello una pequeña comisión por los servicios prestados.
De esta forma, todo el mundo gana, las empresas de crowdfunding inmobiliario cobran una pequeña porción por los gastos y trámites de estudio y los inversores (cualquiera podemos serlos) pueden invertir en el ladrillo con muy poco desembolso económico.
¿Cómo funciona este modelo de inversión inmobiliaria?
Una vez llevados a cabo los análisis de los proyectos los inversores pueden elegir en cuáles quieren participar. Hay que tener en cuenta que las viviendas son escogidas en función de un análisis de viabilidad y otros factores que determine cada plataforma tales como la antigüedad, la zona y la ciudad donde esté ubicada, las reformas que necesite la vivienda, entre otros muchos factores. La finalidad del inmueble y a qué va a ser dedicado también se tiene en cuenta, y es que no es lo mismo un uso comercial que particular.
Una vez seleccionados y analizados los inmuebles se cuelgan en la plataforma o página web para dar a conocer. De esta forma, los interesados pueden invertir en ellos y comenzar a ser inversores y propietarios de los inmuebles (locales y viviendas). En la página web se informa de todos los detalles de cada proyecto, desde el presupuesto inicial, el precio de reforma (caso de ser necesaria), pago de impuestos y la rentabilidad esperada durante el alquiler y la venta una vez alcanza un valor de mercado establecido previamente.
La mayor parte de los inmuebles adquiridos son reformadas y se suelen alquilar. La razón es que mediante el alquiler genera una plusvalía y se espera hasta que el precio de mercado de la vivienda sea el adecuado para vender y recuperar la rentabilidad equivalente a la inversión inicial. Una vez vendido los inversores recuperan la parte correspondiente de los beneficios que se obtienen de la venta.
¿Cuánta es la cantidad máxima permitida para invertir en crowdfunding inmobiliario?
La Ley 5/2015 de Financiación Empresarial regula este tipo de plataformas de para tener un mayor control y limitar el riesgo de la gente que desee ser inversor pero tenga poco o escaso conocimiento de inversión, por ello, se limita la cantidad máxima para invertir según el perfil de inversor que somos; acreditados o no acreditados.
La diferencia más importante entre los dos perfiles es que uno puede invertir más que otro mediante una cuota máxima.
- Acreditados: los acreditados se consideran inversores acreditados profesionales. De esta forma, no tienen ningún tipo de límite para invertir, sin embargo, sí lo tiene el proyecto que no pueden superar más de 5 millones de euros. Para conseguir la acreditación profesional los inversores tienen dos opciones darse de alta como personas jurídicas o físicas (empresas y personas). Los requisitos para los particulares son menores a los de las empresas y se pide un patrimonio de al menos 100.000 euros o ingresos mínimos anuales de 50.000 euros. En el caso de personas jurídicas deben contar con negocios de al menos dos millones de euros, activos por un valor mínimo de un millón de euros, y una cifra mínima de 300.000 € en recursos propios.
- No acreditados: la gente no acreditada se conoce como los no profesionales y su inversión es menor a la de los acreditados. Por ello, no podrán invertir más de 3.000 euros por proyecto ni invertir 10.000 euros al año en cualquiera de estas plataformas. Como último requisito los no profesionales no pueden invertir en proyectos de más de 2 millones de euros. Los inversores no acreditados pueden cambiar en cualquier momento de condición y ser acreditados en el momento en que contraten cualquier servicio de asesoramiento de inversión con una empresa autorizada por la CNMV.
Pros y contras del crowdfunding inmobiliario
Beneficios:
- A diferencia de los fondos inmobiliarios tradicionales y SOCIMIS, con los crowdfunding inmobiliarios la gente normal podemos ser inversores y elegir en qué proyectos invertimos nuestros ahorros, además, también podemos seguir su rendimiento al instante.
- Abre la inversión de la vivienda al gran público, incluido la gente con poca capacidad económica.
- El inversor puede entrar y salir cuando quiera. Es una buena alternativa a la inversión bancaria tradicional y un nuevo producto que se está asentando en el mercado. Y es que no hay que olvidar que los productos de moda suelen triunfar.
Contras:
No todo es oro lo que reluce, y es que a pesar de los beneficios de estas plataformas colaborativas el límite con el que cuentan los proyectos se ve limitado a 5 millones.
- Otro punto negativo es la volatilidad del mercado inmobiliario que puede dar paso a las especulaciones y es que el precio del mercado de viviendas oscila mucho y no es siempre fijo.
- Los expertos recomiendan hacer un estudio de las plataformas, algunas son startups sin experiencia en el mercado inmobiliario. Por ello, es importante que la plataforma de crowdfunding sea dirigida por un especialista en inversión inmobiliaria.
- Existe un peligro serio con el poco control del dinero que invertimos. Es recomendable que la plataforma nos informe de todos los pasos llevados a cabo para que no haya problemas de transparencia. Al mismo tiempo hay que tener cuidado con los pisos fantasmas que abundan en el mercado.
En cualquier caso, nuestra recomendación es acudir a un profesional inmobiliario que te asesore. ¿Y tú invertirías en este sistema tan particular? Déjanos tu comentario que estaremos encantados de responderte. Y recuerda, si quieres estar a la última del mercado inmobiliario no dudes en visitar nuestro blog inmobiliario.