Al sector inmobiliario debemos exigirle que esté constituido por profesionales, porque, sin duda, ser Agente Inmobiliario es una gran profesión, llena de momentos muy bonitos pero, a la vez, llena de complejidad que exigen una formación inmobiliaria contínua.
En primer lugar quisiera presentarme. Soy Juan Bolívar, superviviente de la última gran crisis que está viviendo el sector desde el año 2008; comencé en el mismo en 1988, casi por casualidad, en un momento en el cual el mercado volvía a recuperarse de una crisis (este sector siempre está entre la crisis y la euforia). En los veinte años que transcurren entre estas dos crisis tuvimos que vivir otra más, alrededor de 1992.
Desde entonces hasta hoy los cambios han sido tremendos y, no os quepa duda, que seguirán produciéndose muchos más.
Formación Inmobiliaria, el secreto para perdurar en el sector.
Actualmente es una profesión competitiva, informatizada, donde los grandes profesionales, con una amplia formación inmobiliaria, nos dejan perplejos por su alto nivel de eficacia en todos los campos. En los distintos eventos y foros a los que asisto, me encuentro con agentes que hacen labores de posicionamiento que nos llenan de asombro; agentes con una clarividencia impresionante en la calificación de clientes; tratamiento de las fotografías de los inmuebles de un alto nivel profesional; jornadas de puertas abiertas de una efectividad innegable o el desarrollo del Home Staging, de reciente llegada a España.
No podemos olvidar que los profesionales inmobiliarios tenemos la obligación de adquirir conocimientos de derecho, tributos fiscales, urbanísticos, psicológicos y, cómo no, de ventas. Por eso me pregunto: ¿podemos renunciar a la formación inmobiliaria?
Cómo manejarnos con soltura, por ejemplo, entre los contratos de toda índole (compraventa-alquiler, arras, propuestas de compraventa-alquiler, opciones de compra, herencias, embargos, fincas no inscritas, etc.). Se llenaría este artículo con la simple enumeración de los diferentes documentos que pasan por nuestras manos.
Qué decir de la fiscalidad: impuestos estatales, impuestos regionales, impuestos de diputaciones provinciales, impuestos locales, y la repercusión económica que éstos tienen tanto para la operación de la compraventa en sí, como para la relación fiscal de nuestros clientes con los distintos organismos públicos.
En urbanismo, podríamos llenar unos cuantos libros -y los hay- que deberían abordar el mundo de opciones, trámites y conceptos que van desde el terreno edificable hasta llegar a la vivienda terminada con su correspondiente licencia de primera ocupación. Todo un mundo.
Y qué decir de la venta en sí, que, por supuesto, engloba todo lo anterior, con todos los procesos: posicionamiento, prospección, calificación de propietarios, encargo de venta, proceso de marketing y puesta a la venta, calificación de potenciales compradores, ofertas y cierres de ventas, seguimiento de hipotecas, notaría, registro, etc.
Trabajamos con personas para las que la compra o la venta de una casa es la inversión más importante que hacen en su vida y que será un objeto de felicidad al crear una familia, o de disputa en un proceso de divorcio. Eso no lo debemos olvidar nunca.
No debemos pretender ser Abogados, Asesores Fiscales, Arquitectos, Psicólogos ni mucho menos ejercer como tales -es un delito, salvo que contemos con la preparación adecuada para ello- pero sí tener los conocimientos necesarios para atender a nuestros clientes sin crearles problemas.
Llevo 28 años ejerciendo esta maravillosa profesión. Puedo decir que me considero un buen profesional, formado convenientemente para ejercer como Agente Inmobiliario y, desde hace muchos años, soy formador de agentes. Pero no he dejado de instruirme en ningún momento, de hecho en la actualidad estoy inmerso en una formación (como alumno) que me está llevando meses y con la que estoy muy ilusionado, al tiempo que ejerzo de maestro con nuevos Agentes. Aprendizaje y enseñanza siempre de la mano.
En las próximas entradas de este blog intentaré centrarme en casos concretos que, en gran medida vendrán motivados por la actualidad y, por otra parte, desglosaré materias formativas concretas, para lo cual estoy a disposición de los lectores que lo soliciten.
